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martes, 16 de abril de 2013

De luto, Manzanares

Ser de este municipio de Ciudad Real y no comentar nada del atroz suceso del pasado viernes sería imperdonable, aunque ya esté todo dicho, aunque yo ni sepa qué escribir.
Siempre he pensado que hay que tener mucho valor para suicidarse, casi más que para matar a otra persona, pero lo que hay que tener para matar a dos hijos, eso no sé ni cómo se llama, porque probablemente no tenga nombre, por mucho que quieran decir filicidio, asesinato o algo aún peor.
No puedo definirlo, simplemente la sensación que me provoca es algo hueco, oscuro, muy sucio. El nudo que se me quedó en la garganta cuando me enteré de la noticia fue difícil de deshacer, y lamentablemente a veces parece que estamos acostumbrados a noticias parecidas, pero cuando ocurre en tu pueblo, a pocos metros de tu casa, piensas que sí, que esas barbaridades que salen en los telediarios resulta que pueden llegar a ser ciertas, que te lo tienes que creer, que no hay más remedio que pensar que no, no es una broma macabra.
Y como a todos, me indigna saber que el asesino se quitó la vida después de arrebatársela a sus hijos y a su suegra, ¿por qué no comenzó por él primero?, ¿por qué no se sumió él solo en el silencio y la muerte y dejó que su familia siguiera con su vida? ¿Cómo será ese odio tan profundo a tu pareja para que seas hasta capaz de arrebatar lo más preciado de esa relación? No me entra en la cabeza, como supongo que a nadie.
No hace mucho escribí que no sabía qué nos pasaba cuando somos adultos que perdemos gran parte o toda la inocencia y el brillo de cuando somos niños, y en este caso, lo peor de todo ha sido poner frente a frente a esa inocencia, dulzura y amor de unos pequeños contra la crueldad más despiadada, la locura más inexplicable.
Solo espero que Ángel y Javier, junto a su abuela Catalina, estén en algún lugar mejor y ni siquiera puedan mirar por un agujerito y ver el desgarro de la madre que queda en tierra, que ni sé, ni me explico, cómo podrá mantenerse en pie.
Desde aquí todo mi ánimo para su desconsuelo, y el deseo de que el resto de su familia la arrope como nunca.

3 comentarios:

  1. Bravo Susa. Lo que has escrito es tan cierto como bonito y emotivo. R.

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    1. Gracias R., es una pena tener que escribir sobre esto. Ojalá jamás vuelva a ocurrir nada parecido.
      Un beso.

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  2. Algo espeluznante,sin duda,no hay palabras para tanta crueldad,inexplicable,pero tan duro como cierto,por desgracia.....

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